viernes, 9 de junio de 2017

LA MOMIA (2017) Tom Cruise



LA MOMIA (2017)

Anticipemos con honestidad: La Momia (2017) nos vuelve a traer a Tom Cruise a la palestra y ante los focos pero no es éste el mejor Cruise que se venía recordando. En su labor de intentar abarcar varias facetas, como productor y actor, ha querido traer algo cercano a una revisión personal de la historia clásica de 1932 que encumbrara a Karloff en La Momia original de Karl Freund y de paso sacarse una especie de aventura a lo Indiana Jones, cosa que ya habíamos visto intentar a Stephen Sommers en 1999 con Brendan Fraser en La Momia más reciente que existía hasta la fecha.
¿Es La Momia de 2017 una mala película? No. No puede ser infame algo que ha costado millones de dólares, tiene buenos efectos especiales, algunas secuencias de aventura y riesgo (con una muy aceptable secuencia especial en un avión a gravedad cero) y un reparto bastante sólido: el propio Cruise, Russell Crowe, Annabelle Wallis o Sofia Boutella, entre otros.
¿Falla algo? Sí, bastantes cosas. Y es que Cruise y su director Alex Kurtzman se han quedado algo lejos de lo que un proyecto de esta envergadura podía haber dado de sí puliendo algunas cosas. Suena casi a oportunidad perdida y falta algo de enganche sobre todo por su liviandad en el guión y simpleza de personajes, que tristemente parece premeditada.
Tom Cruise y su productora han reinventado a su manera la franquicia de los clásicos de terror de la Universal pero se puede decir que en conjunto vemos solamente pinceladas sueltas: un poco acción, un pelín de terror (no demasiado, sinceramente) y algo de humor soterrado y puntual con algunas referencias a algún personaje de la literatura gótica sorprendente. Y Sofia Boutella salvando su papeleta de emular a Boris Karloff (aunque superarlo es imposible).
Ya sabemos que el Dark Universe tiene como fin retrotraerse a una revisión de los clásicos de terror de la Universal (aquellos que dieron pie a cintas como La Momia, El Hombre Lobo, Drácula, Frankenstein y muchos más) pero se esperaba algo de novedad o aportes inolvidables. Realmente no los hay y ojalá las nuevas películas sí lo incorporen.
Y es que el cine son sensaciones en muchas ocasiones pero confieso que disfruté más revisionando los 70 minutos de la cinta original de 1932, que recordaba casi de memoria, que en esta nueva adaptación donde esperaba alguna sorpresa que no terminó nunca de llegar.
Sí se agradece que haya un cambio importante en lo esencial: la protagonista es Sofia Boutella, una mujer momia, para evitar comparaciones con Boris Karloff. De hecho, Boutella termina resultando lo mejor de esta película y creo que no hubiera tenido sentido intentar encontrar a otro Karloff. Es una buena idea de Alex Kurtzman haber convencido a la actriz para participar (fue reacia a ello por no someterse otra vez a largas sesiones de maquillaje como le había sucedido en la última cinta de Star Trek).
Finalmente Boutella aceptó y se vio sometida a más de seis horas de maquillaje diarias, metiéndose en la piel de este personaje revivido tras la muerte, huyendo de un sarcófago encontrado en el perdido desierto por unos arqueólogos y que causará una maldición en su regreso a Londres. Ahí termina el guión como tal.
Igual que no se puede negar que Tom Cruise sigue siendo uno de los tipos más hábiles e inteligentes en el mundo de Hollywood en cuanto a acercarse a proyectos que demuestran opciones factibles de poder funcionar, con La Momia el producto le sale aprobado por los pelos. No creo que sea justo decir que es mala. Faltaría más. Sería casi un pecado con este elenco y presupuesto. Pero sí es fallida.
No se entiende que las secuencias se vayan sucediendo porque sí y la historia de la maldición no importe casi nada, siendo solo Sofia Boutella la que despierta interés y los efectos digitales sobre la ciudad de Londres lo más logrado. ¿Qué pasa con Annabelle Wallis, Russell Crowe o Jake Johnson, se preguntarán algunos? Eso quisiera saber yo. Es como si solo pasaran por allí.

Por: Kral_gian 

0 comentarios:

Publicar un comentario